Unas medidas mínimas recomendadas para una pareja son 50 de largo x 40 de ancho x 40 de alto. Si bien son medidas orientativas y no es necesario un espacio exacto sí hay que tener la consideración de que el animal pueda dar aunque sean un par de aleteos de una percha a la otra. Los vuelos cortos son muy importantes para mantener una musculatura tonificada, evitar problemas de obesidad y un plumaje brillante y sano. Los periquitos vuelan en horizontal, con lo que deducimos que la jaula deberá ser preferiblemente larga y no alta. Lo mejor es descartar jaulas en columna, pues aunque son espaciosas, el espacio en vertical es realmente malo de aprovechar.


¿Porqué evitar jaulas en forma de torre? Principalmente porque es espacio muy mal aprovechado. La altura de la jaula nos engaña con respecto al volumen útil, viendo problemas desde el principio, como la dstribución de las perchas. Si tenemos poco espacio a lo ancho ¿cómo evitamos que un pájaro defeque sobre otro al tener que poner las perchas unas sobre otras sin apenas espacio horizontal para separarlas? ¿Cómo hacemos para que no se queden siempre arriba y aprovechen todo el espacio? Son contras evidentes. La mayor parte de las jaulas medianas o de medidas interesantes que encontramos a la venta serían ideales tumbadas y no de pie, pues para nuestra desgracia, son populares porque no ocupan tanto y por demanda la oferta suele ser mayor en forma de torre (y no todos contamos con espacio suficiente para una jaula de dimensiones amplias).

Otro problema evidente son las jaulas redondas. Su sóla forma no permite que el animal haga vuelos de un lado a otro, sólo le permite dar saltitos de una percha a otra. Son las jaulas menos prácticas y menos saludables que te puedes encontrar. Otra cosa es que el radio de su circunferencia sea generoso, eso ya es otra historia. Siendo un señor jaulón da igual si es redondo o cuadrangular, pues los animales tendrán q hacer algo más que dar un salto para ir de un palo a otro que tengan una distancia de casi un metro o más. Pero si tu espacio es más urbano, evita las redondas.



Si por el motivo que sea, sólo tienes acceso a jaulas o jaulones de torre, recuerda que no caben tantos periquitos como si ese mismo espacio estuviese en horizontal (generalmente la capacidad puede dividirse por la mitad). Simplemente con respetar eso (no masificar), y colocando los comederos en la zona más baja para obligarlos a ir hasta el suelo aunque sea para comer, y mantener los bebederos en la percha más alta para evitar que lo defequen, son una opción perfectamente válida y aprovechada al máximo.

Los barrotes de la jaula preferiblemente deberían ser horizontales, pues facilita la sujección mientras trepan por las paredes, cosa que les gusta bastante hacer. También maltratan menos las plumas timoneras porque cuando giran la pluma no se frota en contrasentido, si no que simplemente se desliza suavemente entre los barrotes. Puede estar pintada (preferiblemente de un color oscuro) o puede ser galvanizada. Actualmente es más fácil encontrarlas pintadas, y desgraciadamente de color blanco. Con el color blanco impide la visión de lo que hay en el interior de la jaula, y lo mismo le ocurre a los periquitos, no ven bien lo que hay tras los barrotes porque rebota la luz.

Podemos echarle un vistazo a los huecos para los comederos, el que aparece en la foto de más abajo es exterior y pequeño. Si los queremos así lo mejor es que la jaula tenga una puerta de seguridad como el de la imagen. Sólo tiene ventajas: podemos quitar el comedero y poner otros en el interior si los preferimos de otra manera; al cambiarles la comida no quedará un hueco por el que puedan escapar; si meten la cabeza en el comedero, verán los barrotes y no una posible ventaa de huida... Hay algunos detalles más sobre esto en la jaula de cría.


Si decidimos construir nosotros mismos la jaula, o el jaulón, sin frontales del mismo material que las jaulas ya fabricadas, y decidimos usar malla galvanizada, habrá que limpiarla bien antes de ponernos a montarlo. La malla que escojamos puede ser tanto de agujero cuadrado como de tipo gallinero. El hueco no debe ser mayor de 2,5 cm para que sea seguro.

En la foto que está de ejemplo a la izquierda, usé una estantería de módulos de metal y la capacidad total sería para unos 10 - 12 periquitos (año 2007). Fue mi primer intento de jaulón y aunque quedó horrendo, aprendí mucho sobre la marcha para futuros proyectos. La percha de cemento al ser pesada y con un único punto de agarre quedaba inclinada. Lo único bueno fue su capacidad, salió más barata que una fabricada de medidas similares y las puertas podía ponerlas dónde me pareciese más cómodo.

Un tiempo después intenté dejarlo a la mitad, pues como se puede apreciar, tiene demasiada altura y no se aprovechaba el espacio. De haber podido serrar los perfiles de los listones, la bandeja que usé (una de las baldas de la propia estantería dada la vuelta) podría haber sido extraíble. Al no tener la posibilidad retiraba los canutos "a cucharadas". Poco práctico.

Es un sistema bastante popular, pues la estructura es bastante pesada y tiene una buena longevidad con un trato casi mínimo. Dan mucho juego para medidas variadas e incluso para contruirlo por módulos si deseamos jaulas en batería. Hacer la bandeja para este tipo de jaulas es sencillo si contamos con alguna herramienta adecuada para cortar los perfiles de los listones.

Un detalle importante de la jaula que elijamos es la bandeja. Ya no por el bienestar de los periquitos, si no pensando en nuestra propia comodidad. Una bandeja extraíble tiene la comodidad de no tener que desmontar la jaula, con el peligro de que los pájaros se nos escapen o ahorrarles el estrés (y el nuestro propio), para hacer las tareas de limpieza.

Una bandeja alta impide que las cascarillas de las semillas acaben desparramadas en los alrededores de la jaula, y también frena muchas plumas cuando están en plena muda. Hay bandejas que combinan altura con bandeja extraíble, son bastante cómodas, pero debemos comprobar que las piezas encajen correctamente y el plástico sea bien robusto, pues unas buenas bandejas evitarán que se cuelen las suciedades por ranuras por mala fabricación.

Una jaula cómoda de mantener, siempre tiene más de una puerta, cuantas más puertas mayor comodidad. Incluso puertas pequeñas dentro de las puertas grandes. Cambiando perchas, su limpieza, podemos poner bañeras exteriores, un nido, es más fácil retirar restos de fruta o panizo... Y podemos elegir la puerta dónde no estén los periquitos para evitar fugas o asustarlos más de la cuenta.


Algunas de las jaulas que construí, a parte del jaulón de torre con una estantería:

-Jaulón de malla

-Jaulón de torre

-Voladera

Hasta a fecha ha sido la mejor construcción de todas. Podía estar dentro, y para limpiar usaba escoba y recogedor. Para cambiar el agua y la comida, accedía a través de la ventana que había en el baño, con lo que no era necesario salir para atenderlos y era mucho más seguro para evitar fugas y molestias en general (tanto para los peris como para mi).

Algunas de las jaulas que tuve compradas:

-Jaula alta

Lo único bueno de esta jaula eran algunas puertas, por lo demás, es un tipo de jaula que prefiero evitar. La forma, aunque es atractiva por tener forma de casita, se aprovecha realmente mal. Los pájaros buscan un lugar alto en el que estar, y si este resulta que es una torrecita, subirán ahí, dejando el resto vacío. Esta jaula la usé 2 veces. La primera vez con mis primeros peris, para deshacerme del jaulón hecho con malla porque era muy difícil de limpiar. Estuvo guardada durante años hasta que usé temporalmente antes de comprar el último jaulón que tuve. Durante ese periodo temporal, una de mis gatas lo hizo volcar, se desarmaron los tejaditos y se fugaron muchos de mis periquitos. El mal trago y la impotencia fueron sobrecogedores. En cuanto la pude sustituir, la tiré a la basura.

-Jaula sencilla

Era relativamente amplia, pero solamente tenía dos puertas (en los frontales estrechos) y la bandeja se extraía lateralmente. Si bien ese mecanismo impedía que el plástico permitiese escapes por deformación, retirar lateralmente una bandeja que quizá tenga alguna montañita más alta que la ranura por la que sale, resulta realmente engorroso, especialmente cuando las puertas de acceso son 2 y pequeñas.

-Jaula de transporte/cuarentena

Era una monada. Tenía forma de casita y era muy firme. Los comederos venían integrados, eran transparentes y al retirarlos, las perchas hacían de puerta. La bandeja era bastante alta y no se podía extraer. Venía con una reja para separar el volumen de la jaula del volumen de la bandeja; para limpiarla había que desengancharla entera.

-Jaulón de torre

-Jaulas de cría

La primera que compré era como la segunda, pero tenía la bandeja metálica. Por una parte, la bandeja de metal aseguraba que esa parte no llegaría a romperse por un accidente. La pega era lo pesada que resultaba, pues siendo una parte que mueves mucho para alimpiar cuando la estás utilizando, era un poco incómodo. La segunda venía con la bandeja de plástico, y aunque era más frágil, también era más liviana, se oxidaba en las juntas y la forma de sus bordes, al ser perpendiculares y no con una ligera inclinación, recogía mejor los restos de comida, plumas y demás.

-Jaulón

Fue, sin duda alguna, la que más me gustó de todas las jaulas que compré. A pesar de lo flojos y quebradizos que eran los ganchos para adosar las partes, soportó sin problema alguno la actividad de mis peris. La bandeja extraíble estaba dividida, y aunque era un poco guarrería la línea del medio, era muy fácil de quitar y limpiar.










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